Padres e hijos tuvieron la ocasión de conocerse más profundamente, de mirarse como nunca antes lo habían hecho para reflejar en un papel con técnica libre algo mucho más importante que un físico, su personalidad.
Después de experimentar con materiales, texturas, olores, sabores... y despertar todos nuestros sentidos plasmaron con su imaginación y aquello que sentían.
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Una vez más pusimos de manifiesto la importancia de trabajar en familia, de pasar un rato del día sin correr, sin peleas por lavarnos los dientes o comer, sólo hacía falta tocarnos y mirarnos de manera diferente.
Aquí os dejo algunos ejemplos de lo bien que lo hicieron:
Candela en el dibujo izquierdo hizo un magnífico trabajo reflejando la ternura y el cariño a través de los colores elegidos, aunque cabe destacar en especial la expresividad de los ojos representados y la fuerza de los mismos, y cómo con lentejas pretende dibujar unas pecas en su rostro. Todo lo envuelve en un arco iris y un cielo lleno de nubes de algodón. Contrasta la ternura y la fuerza a la vez.
A Marco le costó un poquito lanzarse en la experimentación. Dibujó a su madre con una gran sonrisa, enorme diría yo y con eso le bastaba. A él no le hacía falta más. Pero poco a poco fuimos dirigiéndoles en su experimentación con los materiales que tenía sobre la mesa eligiendo el café y el azúcar. Hasta acabar cubriendo todo de un tono verde precioso. Es curioso observar la diferencia de un trazo decidido en la cara de su madre, con un trazo que empieza a dudar porque no sabe para donde tirar más abajo. En cualquier caso nos gusta mucho su trabajo.
El trabajo de Estela pintando a su papá es muy característico porque hace algo que todos hacemos cuando dibujamos y es exagerar la realidad porque nos gusta o porque nos llama más la atención. Le hizo con unos grandes ojos y unas largas pestañas, usando com pupila dos lentejas. También quiero resaltar algo muy importante en este dibujo y es el esfuerzo que hace dibujando pensando en lo que hay debajo. Os invito a que miréis sus piernas. Ella dibuja los pantalones sabiendo lo que hay debajo. Es una práctica que los adultos olvidamos cuando dibujamos personas. Tratamos de dibujar con poco éxito el perfil, sin pensar en la estructura, el esqueleto que llevamos dentro. Si dibujáramos de dentro hacia afuera seguramente las proporciones serían más acertadas. Fantástico Estela no pierdas esa mirada.
De los papis solo un comentario general, sois fantásticos y lo habéis hecho muy bien. Habéis dado una lección muy importante a vuestros pequeños. No importa pintar mejor o peor, lo importante es intentarlo, como todo en la vida. Debe importarnos menos el fracaso y ser más valientes en lo que hacemos. Y por último lo importante en un retrato es mostrar lo que nuestro modelo lleva dentro porque si somos capaces de verlo y además representarlo seremos capaces de empatizar mucho más con sus sentimientos. Conocernos y aprender a mirarnos hace que sepamos cuando el que tenemos enfrente está triste, alegre, feliz o preocupado."
Begoña San Miguel
Begoña, ¡qué interesante propuesta! más allá del preciado trabajo de valorarse y reconocerse, pintar al otro es una muestra muy grande de expresión del cariño y reconocimiento del ser querido, en este caso... algo que realmente primordial y ¡tan necesario en estos tiempos! Gracias, mi nieta Candela aprendió y disfrutó con ello. Memes
ResponderEliminarNo pudimos ir pero ojalá el año que viene resurja esta bonita propuesta. Gracias Begoña y gracias a esta escuela que es un pozo sin fondo de apertura y riqueza.
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