¡Que viene el cartero!

                                      

Una de las señas de identidad de nuestra escuela es que su profesorado está siempre pendiente de las inquietudes de nuestros hijos e hijas para sacarles provecho y transformarlas en oportunidades de aprendizaje. En el caso concreto de la Campana, algunas de las preguntas que los chicos y chicas empezaron a hacer en clase con más insistencia hace unos meses estaban relacionadas con asuntos cotidianos como son las direcciones postales y el envío de cartas.

Ya sabían que sus calles tienen un número y que los carteros dejan cartas en sus buzones... ¿Pero cómo funcionaba ese sistema y sabía el cartero realizar su trabajo?

Afortunadamente, en la clase contamos con Antonio, padre de Candela y cartero de profesión, que colaboró activamente en el proyecto que su maestra Belén ya había pensado realizar. Antonio les hizo una visita y les explicó cómo los carteros recogen las cartas, las clasifican, las reparten y otros detalles que forman parte de su profesión.

Aprovechando que la Navidad estaba cerca y los "Campaneros" iban a estar unos días sin verse - y una vez que ya Antonio les había explicado como funcionaba el servicio postal - Belén les pidió que llevasen a clase sus direcciones y las anotaran en sus carnets para que todos pudiesen verlas y así  tener la oportunidad de mandarse cartas durante las vacaciones. Una vez terminada cada carta, la meterían en un sobre en el que apuntarían los datos correspondientes, como ya habían aprendido a hacer, y la echarían en algún buzón cercano a sus domicilios.

Sin embargo, el proyecto no se quedó ahí y siguió creciendo dado el interés que seguían mostrando en este tema. Relacionándolo con la comunicación a través del lenguaje escrito, Belén les sugirió la idea de que cada uno de ellos y ellas hiciese un pequeño buzón personal que colocarían en la clase, y así poder escribirse cartas o pequeñas notas durante el resto del curso.

Las familias que formamos parte de la Campana damos fe de que el proyecto ha sido un éxito y que el buzón personal está siendo uno de los grandes "protagonistas" del curso. ¿Con qué nos volverán a sorprender la próxima vez Belén y nuestros niños y niñas gracias a su imaginación y creatividad?